La mini galería de VLADIMIR TURNER y ONDŘEJ MLADÝ en Praga

En el eterno debate del arte urbano en la calle o en la galería es muy difícil no posicionarse en uno u otro lado (siempre con alguna que otra reserva de por medio, claro está). Por eso me ha gustado tanto esta intervención que VLADIMIR TURNER y ONDŘEJ MLADK realizaban hace poco en Praga; porque en lugar de posicionarse, lo que hace es jugar con ambos bandos y reírse un rato.

Se trata de una mini galería de arte que refleja a la perfección ese concepto peyorativo del “cubo blanco”. Paredes y suelo blancos regados en luz fluorescente. La gran diferencia es que en esta ocasión, la galería es ilegal y está realizada bajo un puente de hormigón, que por lo visto es uno de los sitios predilectos de otros artistas y escritores de graffiti en Praga.

La imagen es surrealista y ridícula. Un cubo blanco colgando de un puente que atraviesa una autopista… ¿una galería? ¿una obra? Es difícil de decir debido a la brutal descontextualización. Ese es el quid de la cuestión; el contexto. ¿Es legitimo exhibir en una galería el arte destinado a estar en la calle? ¿Qué tal llevar la galería al terreno del arte urbano?

Os recomiendo que os paséis por la web de VLADIMIR TURNER en la que se recogen éste y otros muchos trabajos (acompañados de sus correspondientes vídeos) que invitan a reflexionar sobre el uso que hacemos de la ciudad, a la vez que derrochan ingenio y humor. Unos ejemplos:

- Enlightment; redirección de los focos de una valla publicitaria para iluminar una escultura pública de Josef Klimes:

- Merry-Go-Round; hacer un tiovivo de unas vallas publicitarias giratorias:

- Teepee: realizado con objetos encontrados por las calles de Praga: