POBRE SHEPARD FAIREY

Os comentaba hace poco que el muro de Houston Street en Manhattan, perteneciente a Deitch Studios, ya luce su nueva obra de Shepard Fairey. De todos es sabido que este artista levanta pasiones y odios a partes iguales… bueno casi; me da la sensación de que la balanza se inclina poderosamente hacia los “odios”, pero para gustos colores.

La cuestión es que todos sabíamos la polémica que iba a levantar esta obra y también, que las probabilidades de que fuera “bombardeada” iban a ser muy grandes. Pero ni yo mismo me imaginaba la rapidez y la cuantía de dichos bombardeos. Fairey terminaba el enorme mural el pasado viernes día 23 por la noche. Apenas unas horas después, NAW, que pasaba por ahí, decidió echarle una firma. A la mañana siguiente, se limpió y punto.

El sábado, alguien decidió atentar contra el mural de una manera más grotesca si cabe, haciéndole varios agujeros; algunos de un tamaño bastante considerable (descritos como del tamaño de un melón!).

Pero la cosa no acaba ahí. Ayer domingo, alguien le añadía una pegatina-poster de una cadena de tiendas bastante famosa en los USA (TARGET) y que posee una imagen corporativa con la misma estética que el mural (colores rojo, negro y blanco, una diana como logotipo, etc.).

Estamos a día 26; no han pasado ni 72 horas desde que se terminara el mural; la exposición de Fairey ni siquiera se ha inaugurado y ya van tres actos vandálicos… la cosa promete. Yo personalmente, me río.. eso si, bajito para que nadie me oiga.

Imágenes vía ANIMAL.